Pensar acerca de la depresión no tiene que ser una experiencia sombría. Ensaya estas actividades para que las hagas con uno de los padres, con un amigo… o ¡sencillamente contigo mismo!

Dibujar la depresión

Lo que necesitas: papel, rotuladores, lápices de colores o un programa de dibujo computarizado.

¿Cómo ves tú la depresión? ¿Sería una criatura viviente o un objeto? ¿Tendría nombre? ¿Cómo lo decorarías? ¿Cómo se vería la depresión si fuera un árbol o una flor; un vestido; un edificio; una persona o un animal?

Collage en una caja de zapatos

Lo que necesitas: Una caja vieja de zapatos, tijeras y pegamento, revistas y periódicos viejos, fotografías.

Esta caja de zapatos va a representarte por dentro y por fuera. Empieza por fuera. ¿Qué lado tuyo ve el resto del mundo? ¿Qué emociones, comportamiento y experiencias son las que les muestras al mundo? Decora la parte exterior de la caja de zapatos para que refleje tu «exterior».

Cuando termines, mira detenidamente la parte interior de tu caja de zapatos. ¿Existe una parte tuya que no le muestras al mundo? ¿Hay cosas tuyas que la gente no sabe o ve? ¿Hay sentimientos que no puedes dejar salir? Decora la parte interior de la caja de zapatos para que refleje tu «interior».

Usa la caja de zapatos como tú quieras. Acumula tus recuerdos favoritos. Guarda una publicación o un diario, o escríbete cartas para guardar dentro de la caja.

Esculpámonos

Lo que necesitas: Alguna clase de arcilla como Sculpey o Play-Do.

Haz esculturas que representen:

• Cómo te ves por dentro cuando te sientes muy triste acerca de alguna cosa.
• Cómo te sientes cuando alguien que quieres está profundamente triste o deprimido.
• Un animal o un monstruo que puede luchar contra tus malos sentimientos.
• Una persona o criatura que te escuche y comprenda todos tus problemas.

http://pbskids.org/itsmylife
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