De William
No todos estamos hechos genéticamente para ser uno de esos modelos super delgados o bronceados de la televisión. Algunos nacimos para ser bajitos, gordos, delgados, altos o verdes. Así que querer ser de siete pies de alto y pesar 275 libras es ridículo si tu papá y mamá tienen apenas cinco pies de alto y pesan 100 libras los dos. Trata de sentirte bien contigo mismo como sea posible, porque talvez esa persona de la televisión tenga unos abdominales perfectos, pero posiblemente hay algo para lo que eres bueno y él no.

De Jenna
Ya cuatro de mis mejores amigas han pasado por sus problemas de desórdenes alimentarios, tanto para controlar sus vidas, perder peso, afirmarse con la gente que las rodea o hacer que los demás las noten. Las ayudé tratando de hablar con ellas y de entender por lo que atravesaban. Quería saber por qué estaban haciéndole daño a sus cuerpos. Después de hablar con ellas, hablé con mi mamá y le pedí consejo. En dos ocasiones, les dije a mis amigas que iba a hablar con sus padres, y lo hice. Pensé que necesitaban estar al corriente de lo que les estaba sucediendo a sus hijas, si no lo sabían todavía. Es importante hablar siempre con un adulto cuando sientes que un amigo o amiga se está haciendo daño. Todas mis amigas están bien ahora y ¡están muy saludables y felices! Pasaron por una experiencia dura, pero están mucho más fuertes y seguras de sí mismas después de haber pasado por su desorden. No te sientas nunca presionada por los medios de comunicación de ser super delgada o super bronceada. Las personas de los medios que proyectan esa imagen no son necesariamente felices. En realidad, probablemente se torturan tratando de mantener el «tipo de cuerpo perfecto». Te va mucho mejor queriéndote a ti misma así como eres.